Nacidos al otro lado del charco, tuvieron que emigrar a España obligados por la situación que se veía en su país. El padre, Héctor, deja Buenos Aires por motivos políticos y con él se lleva a su esposa y a su prole: Ernesto y Malena. En Argentina ya se fraguó una profesión que seguirían sus hijos, la actuación. Una vida dedicada a los escenarios y a las cámaras. O mejor dicho, tres historias de familia con puntos en común: el apellido y la ocupación laboral.
El patriarca de la familia nace en Buenos Aires el 29 de septiembre de 1921. Desde joven se siente atraído por el mundo de la actuación, así que decide cursar estudios de arte dramático. Entretanto llega su debut teatral, en 1948, cuando protagoniza Prohibido suicidarse en primavera, una obra de Alejandro Casona. Finaliza los estudios y en 1950 crea la compañía Nuevo Teatro, con la que renueva la escena argentina de los años 60, aunque la fama le llega con sus papeles en la gran pantalla. Desde su primera aparición en 1965 con Todo sol es amargo de Alfredo Mathé, su carrera cinematográfica ha sido de lo más prolífica, interviniendo en algunas de las mejores películas de la época: Argentino hasta la muerte, La fidelidad, La venganza del beto Sánchez, El santo de la espada, La mafia, Los siete locos y La Patagonia rebelde, por la que consigue el Oso de Plata en el Festival de Berlín.
En el terreno personal siguen los éxitos que llegan en forma de descendencia. En 1070 nace Ernesto, su primer hijo, fruto del matrimonio con su esposa, la psicóloga Tita Bacaicoa. Pero en 1974 la familia abandona su Argentina natal –debido al activismo político izquierdista de Héctor– tras el golpe de estado que tuvo lugar en el país poco tiempo después del nacimiento de su hija Malena, por lo que se ven obligados a huir a España. Un año más tarde, es amenazado de muerte por la Alianza Anticomunista Argentina, un grupo paramilitar de ultraderecha de la República Argentina, motivo por el cual decide no regresar a su país. Desde esa misma época, su participación en producciones españolas ha sido más que destacable. Memorables son A un dios desconocido (premio al Mejor Actor en el Festival de San Sebastián), El crimen de Cuenca, El nido (película nominada al Oscar y premio al Mejor Actor de la Asociación de Cronistas de Nueva York), Don Juan en los infiernos y El detective y la muerte, aunque quizás, su actuación más entrañable de los últimos tiempos es la que lleva a cabo en el film El hijo de la novia. Más de setenta películas a sus espaldas, interpretando a personajes de todo tipo, han hecho de él un rostro más que familiar en las grandes pantallas de medio mundo. Por si fuera poco, su carrera artística incluye también decenas de obras de teatro e incluso teleseries. Su legado seguirá vivo con sus dos hijos, Ernesto y Malena, también actores. Precisamente, fueron sus vástagos quienes entregaron a Héctor el Goya de Honor en 2004, premio que dedicó a su mujer, a sus hijos, a la Argentina, a la Unión de Actores y, decididamente, a la libertad de expresión.
La vida de este joven actor empieza el 25 de julio de 1970 en Buenos Aires. Su más tierna infancia transcurre en casa y rodeado de sus padres: el actor Héctor Alterio y la psicóloga Tita Bacaicoa. Con apenas tres años y medio ve como se amplía la familia con el nacimiento de su hermana Malena y poco tiempo más tarde el clan abandona Argentina para instalarse en España. El pequeño Ernesto no padece el desarraigo propio del exilio –ya que probablemente con su edad ni siquiera se lo plantea–, pero en la etapa de la adolescencia llegan las dudas, y es que construir un futuro es una ardua tarea cuando se es joven. En un principio se decanta por las ciencias, atraído por la biología y más tarde con la historia, pero decide que no es lo suyo. En este tiempo sigue negando su vocación artística, como ha confesado en más de una ocasión, por pudor a ser actor ante su padre. Así pues, se deja seducir por el arte (música, fotografía, historia…), pero le cuesta llegar a su verdadera pasión. Finalmente, decide matricularse en la Escuela de Arte Dramático de Cristina Rota, una de las más prestigiosas de España. Tanta es su ambición en el terreno que completa sus estudios con clases de danza con Agustín Belusci. Durante las lecciones de Rota entabla amistad con Guillermo Toledo, Alberto San Juan y Nathalie Poza, con quienes forma el grupo teatral Ración de Oreja. Su primera representación es Animalario, nombre definitivo de la compañía, que se fusiona con otro grupo de teatro. La filosofía de esta nueva experiencia es ser crítico con la sociedad de su tiempo. Para Ernesto, este compromiso y reivindicación va más allá y se vincula en política, siempre con aires contestatarios y sin identificarse con un único partido político. En esa época su carrera en el cine empieza a cobrar peso, en parte gracias a sus pequeños papeles en películas como Mi nombre es sombra, Morirás en Chafarinas o Más amor que frenesí. Por aquel entonces acepta trabajos fugaces en series de televisión (Lleno por favor, Colegio mayor, Los ladrones van a la oficina, etc.). En 1998 une su firma, junto a la de otros actores, a un manifiesto para exigir el fin de la limpieza étnica de Slobodan Milosevic y el cese los bombardeos de la OTAN. Es entonces cuando empieza a participar en películas comerciales como Los años bárbaros, El cuarteto de La Habana (por la que fue nominado al Premio Goya al Mejor Actor Revelación), Los lobos de Washington, Kashbah, Buñuel y la mesa del rey Salomón o Deseo. En 2002 acepta participar en El otro lado de la cama, una concepción costumbrista del musical dirigida por Emilio Martínez Lázaro que cuenta la historia de dos amigos y sus líos de faldas. El resultado fueron unas buenas cifras y todo un éxito en taquilla. En el film, Ernesto Alterio coincide con Guillermo Toledo y Alberto San Juan (compañeros de Animalario) y obtiene una candidatura a los premios de la Unión de Actores. Más tarde llegan títulos como Días de fútbol (nominado al Fotogramas de Plata y al Premio Goya al Mejor Actor); Incautos; Muertos comunes; El Método; Los 2 lados de la cama; Semen, una historia de amor (en la que comparte cartel con su padre y hermana) o la teleserie Vientos de agua, donde repite la experiencia de trabajar con Héctor Alterio. En 2006 nace su hija Lola, fruto de la relación con la actriz colombiana Juana Acosta y es nominado, por segunda vez, con el Fotogramas de Plata.
La pequeña del clan nace el 21 de enero de 1974 y como el resto de la familia lo hace en Buenos Aires. Cuando apenas ha cumplido unos meses, su familia emigra a España por las causas antes mencionadas. Su infancia transcurre como la de cualquier otra niña, pero su vocación parece más clara que la de su hermano Ernesto, así que decide matricularse en la escuela de Cristina Rota. Su primera oportunidad en la gran pantalla le llega de mano de Eva Lesmes y la comedia El Palo, en el año 2000, donde interpreta a una ladrona marginal. Un año más tarde, es finalista en los Premios Goya en la categoría de Mejor Actriz Revelación. Los siguientes años siguen siendo fructíferos a nivel laboral y estrena Torremolinos 73 y Las voces de la noche. En 2005 ve la luz Semen, una historia de amor, que cuenta en el reparto con su padre Héctor, su hermano Ernesto y ella misma. Pero sin duda, el éxito y la fama aún están por llegar… A pesar de haber participado en algunas series televisivas, su personaje de Belén, en la serie Aquí no hay quien viva representa el gran salto. Lo interpreta durante cuatro años y le vale para hacerse con el premio a la Mejor Actriz Secundaria de la Unión de Actores en 2004, una candidatura a los Fotogramas de Plata en 2005 y el Premio a la Mejor Actriz según la Academia de Televisión Española en 2005. Tras el final de la serie por motivos mercantiles (Telecinco compra parte de la productora de la serie), se exporta una historia similar a la cadena en cuestión, bajo el título La que se avecina, donde Malena Alterio interpreta el papel de Cristina durante la primera temporada. En este 2008 ha ampliado registros: se ha dedicado al teatro y ha representado la obra Tío Vania de Anton Chejov en Madrid, ha estrenado la película Una palabra tuya y está grabando Al final del camino, además de seguir con el rodaje de la serie televisiva de Telecinco.